A la hora de seleccionar los cabos de amarre de nuestra embarcación, disponemos de múltiples opciones entre las que elegir.
Para las amarras, los requisitos deseables son resistencia al esfuerzo y elasticidad. Además, es muy importante que sean resistentes a la exposición al sol para que no se deterioren con rapidez.
A continuación, encontrarás toda la información necesaria para saber qué cabos elegir, cómo mantenerlos en buen estado y algunos consejos para amarrar tu barco.
Cómo elegir los cabos de amarre
Para elegir los cabos que mejor se adapten a tu embarcación, deberás fijarte en cuatro aspectos fundamentales:
Material del cabo
Fijarse en el material del que están hechos los cabos es fundamental y se recomienda utilizar fibras artificiales, evitando fibras naturales como la pita, el cañamo, o el sisal, para que sea más resistente.
El
nylon suele ser la mejor opción para los cabos de amarre por su resistencia y elesticidad y, además, la más barata. Ofrece una resistencia óptima a los rayos del sol y a los productos químicos o al combustible.
Otros materiales, como el poliéster o el polipropileno, pueden ser alternativas al nylon pero no ofrecen los mismos resultados que este. Los cabos de
poliéster (dacron) tiene elasticidad reducida y se vuelven rígidos demasiado pronto y, los cabos de
polipropileno cuya peculiaridad es que flotan, se degradan más rápido con la luz del sol.
Diámetro del cabo
No necesariamente es mejor un cabo de mayor diámetro. Los cabos más gordos no proporcionan necesariamente más resistencia que los más finos con cargas iguales, además, hacen más incómodo adujarlos o amarrar con ellos.
Si quieres conocer más a fondo cómo amarrar tu barco y que material usar
Longitud del cabo
Para el amarre, lo habitual es cortar y empalmar los cabos para adaptarlos a los cambios del nivel del mar con las mareas. Para el
spring bastará una amarra de la misma longitud que la eslora del barco y para los
largos, basta con la mitad de la eslora.
En todo caso es conveniente que nos sobre algo a quedarnos cortos.
¿Elegir un cabo náutico para el amarre de doble trenzado o colchado?
Generalmente podremos elegir dos tipos de cabos para amarre: el cabo de doble trenzado, o el colchado. El doble trenzado es más suave al tacto y es más sencillo de adujar. Además suele venderse en una gama más amplia de colores. El cabo colchado es más económico.
A continuación una relación con las características de los materiales más usados:
- Poliéster Trenzado. Resistencia, suavidad al tacto, bajo alargamiento y flexibilidad. Para escotas y drizas de banderas.
- Poliéster Preestirado. Alta resistencia a la abrasión, a la humedad y a los rayos ultravioleta. Ideal para drizas.
- Poliéster Acalabrotado. Resistencia a la abrasión y bajo alargamiento. Para las amarras.
- Poliamida Trenzado (Nylon). Elástico, resistente a los tirones y flexible. Ideal para cabos de arrastre y remolque ya que es capaz de absorber los tirones que se pudieran producir y no flota. Se suelen utilizar al igual que el poliéster en amarres y fondeos.
- Polipropileno. Ligero, suave y flexible. Su principal ventaja estriba en su bajo precio. Se usa para guindolas y cabo de arrastre de esquiadores porque flota.
- Aramida (Kévlar). Excepcional resistencia, lo que permite reducir diámetros. Bajo coeficiente de elasticidad. Muy caro y además, sensible a la radiación ultravioleta del sol.
Cómo conservar bien los cabos de amarre
El material deberá permitirnos hacer costuras y gazas en sus extremos.
Antes de empezar a elegir un cabo es bueno conocer cuales son sus enemigos. El calor excesivo o la arena acaban destruyendolos poco a poco. La sal, actúa como abrasivo y amplifica los rayos del sol y la humedad durante largos periodo, también acaba deteriorandolos, por lo que siempre se deben secar al sol y nunca guardarlos mojados o húmedos.
Es muy conveniente aclarar los cabos con agua dulce y tibia de vez en cuando, para eliminar la sal, pero en ningún caso meterlos en la lavadora ya que se acabarían rompiendo las fibras.
Conceptos básicos para amarrar un barco
Para realizar un seguro amarre de tu barco, es importante que entiendas los conceptos básicos para ello:
- Líneas de proa: estas impiden que la proa de una embarcación se muevan de lado a lado, es decir, la parte delantera del barco. Otras de sus funciones es evitar que un barco se aleje cuando está amarrado por el lateral como ocurre cuando se procude el amarre en un muelle.
- Líneas de embarque: en el caso de los cabos de embarque, se usan para el barco no se aleje del muelle o para abordar el barco cuando se pretende acercarlo.
- Líneas de resorte: sirven para que el barco no se mueva para delante o para detrás. Por norma general, se suelen utilizar dos aunque en ciertas ocasiones se utilizan hasta cuatro.
- Líneas de popa: su función es la de que no se mueva de lado a lado la popa, es decir, la parte trasera del barco. Además, se consigue de esta forma que la embarcación no se aleje del muelle.
A parte, para un buen amarre se contará con un equipamiento especifíco que te contamos a continuación:
- Defensas: sirven para amortiguar los posibles golpes o choques del barco, principalmente cuando está amarrado en el muelle o puerto. De esta forma, se puede evitar también cuando se produce el embarco o desembarco que la colisión con otro barco u objeto, genere un daño a la embarcación. Hay muchos tipos de defensas pues son accesorios que pueden ser desde un trozo de espuma plano hasta una boya inflable de goma (suelen ser las más comunes)
- Cornamusas: es un accesorio con forma de "T" que sirve para amarrar los cabos asegurando así que no se mueva.
- Pilotes: es una pieza alargada de metal o de madera que se clava en el fondo. Algunos de ellos se mantienen por si solos y otros están anclados a estructuras del propio muelle o embarcaderos.
Los cabos son fundamentales para el amarre, pero de eso te hablamos en este otro post para que puedas conocer los
tipos de cabos que existen.
Precio de un amarre
Saber cuánto cuesta amarrar un barco dependerá mucho del lugar en el que quieras dejar tu barco. Dependerá también del tamaño y del tiempo que quieras dejar tu barco amarrado. Recuerda aún así que es fundamental que elijas un buen material con el que hacer el
nudo marinero, escogiendo el material oportuno.
También influirá mucho la época del año, ya que como es lógico en verano siempre es más caro.