- Despeje la cubierta de objetos y equipos que no estén sujetos.
- Compruebe y revise los cabos y amarras de la embarcación auxiliar y de la balsa salvavidas.
- Cierre escotillas y portillos y cualquier acceso que pueda permitir filtraciones al interior del barco (grifos de fondo).
- Compruebe que en el interior está todo colocado y guardado.
- Tenga a mano achicadores y baldes.
- Ordene a la tripulación el uso del chaleco salvavidas y los que vayan a estar en cubierta que se enganchen a una línea de vida.
- Señale la posición en el cuaderno de bitácora, cartas de navegación así como en dispositivos electrónicos. Si necesitamos de la asistencia de Salvamento Marítimo nuestra posición es fundamental para llevar a cabo el rescate.
- Encienda las luces de navegación.
- Encienda el radar para poder detectar objetos u otras embarcaciones en las proximidades si la visibilidad se ve reducida.
- Colóquese ropa de abrigo a ser posible impermeable, incluido el calzado.
- Suministrar pastillas antimareo para quienes las necesiten.
- Establezca el sistema de guardias. Mientras dure la guardia el resto de tripulación deberá evitar estar en la bañera, donde se corre más peligro y se puede coger frío.
- Si vamos en un velero rizaremos la mayor con el primer o segundo rizo en función de la fuerza del viento. Reduciremos con el enrollador la superficie de la trinqueta si fuese necesario para equilibrar el barco.
CAPEAR EL TEMPORAL
- Significa mantener el barco avante y la mar entrando por la amura ajustando la velocidad.
- Rizaremos la mayor y aplanaremos lo máximo posible, eligiendo un rumbo de ceñida.
- Enrollaremos la trinqueta parcialmente en función de la intensidad del viento.
- Significa navegar en la misma dirección del viento y la mar, controlando la velocidad.
- Navegamos en la misma dirección del viento y las olas, produciendo una navegación más cómoda. Cuidado, pues a sotavento podemos tener la costa.
- Navegaremos con las olas entrando por la aleta y teniendo cuidado de que un golpe de mar pueda dejarnos atravesados. Podríamos volcar
PONERSE AL PAIRO
- Es un maniobra que consiste en acuartelar el foque, rizar la mayor en función de la intensidad del viento y dejar el timón a barlovento.
- La embarcación experimenta una suma y resta de fuerzas que equilibra el barco y reduce la velocidad prácticamente a 0.
- Arriar todas las velas y llevar el timón a barlovento.
- La embarcación quedará aproximadamente de través.
- La deriva es mayor a sotavento.
- Arriamos todas las velas y hacemos firme el timón a barlovento.
- La embarcación adopta una posición de equilibrio sobre las olas.
- Es aconsejable colocar un ancla de capa por la amura para evitar que el barco se atraviese a las olas.
- Colocamos uno o dos cabos por popa lo suficientemente largos.
- Los cabos pueden formar una gaza o arrastrar un ancla flotante lo que ayudaría a incrementar la resistencia y dar más estabilidad.
- Es una manera de que la popa de la embarcación se mantenga estable entre las olas.
- Dispositivo en forma de paracaídas que se une a la embarcación mediante un cabo.
- Lanzado desde la proa debe alcanzar al menos de 10 a 15 veces la eslora.
- Conseguiremos que la proa de la embarcación se mantenga en la dirección de las olas y el viento. Reducirá el abatimiento y suavizará los pantocazos.