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Cómo Preparar tu Barco para Navegar en Aguas Internacionales

  • Fernando Pastor Profesor
Fernando Pastor
Cruzar fronteras internacionales con tu propio barco es una aventura emocionante, pero también es un proceso que requiere una preparación meticulosa y un entendimiento claro de las regulaciones internacionales. A diferencia de viajar como pasajero, llevar tu embarcación a otro país implica una serie de trámites y procedimientos que no deben tomarse a la ligera.

En este artículo, te ofrecemos una guía detallada para asegurarte de que tu viaje transcurrirá sin contratiempos.
Tabla de contenidos
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  • Cruzar las fronteras con tu barco
  • Cada país es diferente
  • Cuidado con las inspecciones
  • Debes tener una buena organización
  • Haz los deberes

Cruzar las fronteras con tu barco

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Llevar nuestro barco al extranjero no es tan fácil como viajar al extranjero nosotros mismos. Es verdad que cuando viajamos a otro país a veces hay que rellenar formularios previos, obtener visados, llevar encima los pasaportes y hacer trámites aduaneros, que en ocasiones pueden resultar farragosos pero llevar un barco a otro país puede multiplicar aún más esos inconvenientes.

La idea de soltar amarras y aventurarse al extranjero no debe tomarse a la ligera ya que no solo significa que debemos salir de nuestro propio país sino que también debemos entender que estamos en otro país con otras autoridades que tienen sus propias normas y formas de ver las cosas.

Cada país es diferente

No existen dos países con los mismos procedimientos de entrada y salida para yates que hacen escalas en sus aguas. Ten presente que el espacio "Shengen" es para el libre tránsito de personas pero no para los barcos de recreo. En cualquier caso los países miembros se obligan a sí mismos a facilitar los trámites de los residentes de los países europeos miembros lo que facilita mucho los viajes. Respecto al resto del mundo, las autorizaciones digitales previas están muy extendidas pero no garantizan que podamos evitar tratar en persona con los agentes locales y su papeleo. A veces, mucho papeleo.

Si decidimos aventurarnos y llegar a otros países sin previo aviso, podríamos encontrarnos con la desagradable sorpresa de que se rechace nuestra entrada y tengamos que continuar el viaje sin disfrutar de nuestra estancia en nuestro destino deseado. Hay países que exigen que los yates realicen los trámites de entrada tan pronto como tocan tierra; de no hacerlo así se pueden enfrentar a severas sanciones. Si fuera este el caso del país que visitamos, debemos acudir al primer puerto donde se realicen los trámites aduaneros y esperar atracados en un muelle de "cuarentena" hasta obtener la autorización definitiva.

Si llegamos en domingo o en días festivos, algunos países permiten que los yates hagan sus trámites el primer día hábil posterior a su llegada, pero para advertir de esa situación a las autoridades izaremos la bandera 'Q' amarilla en el costado de babor, bandera que cambiaremos por la de cortesía de ese pais una vez seamos autorizados.
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Cuidado con las inspecciones

POLICIA PORTUARIA

Ten en cuenta que las autoridades pueden inspeccionar tu barco al ingresar al país o en cualquier otro momento. La declaración de entrada al país es un trámite serio que no debe tomarse a la ligera. Si no declaramos cantidades significativas de dinero, alcohol, armas, medicamentos, plantas, semillas o mascotas, entre otros, podríamos sufrir confiscaciones, cuarentenas, o incluso podríamos enfrentarnos a una detención en calabozos o hasta en prisiones. Ten presente que también pueden revisar tus redes sociales para conocer tu estilo de vida o tus intenciones en el país. Por eso si fuera poco, además es posible que la policía entre al barco con perros entrenados para detectar drogas o sustancias ilegales. Hay países que no son nada permisivos con estos asuntos.

Debes tener una buena organización

Hay muchas cosas que se pueden hacer con anticipación para llevar nuestro barco al extranjero. Tener todos los documentos en orden de revista es un buen comienzo. Dispón de varias copias impresas en papel de los documentos más solicitados para que los funcionarios las manipulen y se las queden para verificarlas si lo consideran necesario.

Organízalo todo en carpetas plastificadas e impermeables que puedan ser llevadas de un lado a otro en la embarcación auxiliar y que sean de fácil manipulación para encontrarlo todo en un instante. De hacerlo así será menos probable que enfademos a los amables agentes locales que nos los soliciten. Pon la bandera de cortesía del país visitado y tenla izada siempre para indicar a sus autoridades que entiendes que estás en su jurisdicción y que te atientes a sus leyes.
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Haz los deberes

Investiga qué documentos podrías necesitar para tu tripulación y tu barco; desde pasaportes y visados ​​hasta vacunas y seguros médicos. Consulta la web oficial del país en el que deseas navegar para informarte sobre sus políticas de inmigración y requisitos específicos para embarcaciones de recreo, que pueden diferir mucho de los aplicables a cruceros turísticos.

Busca información específica sobre la navegación de recreo en esa región y consulta fuentes confiables como derroteros o 'Pilots'. Estos recursos son útiles para obtener una visión general rápida de un lugar y detalles sobre las gestiones exigidas, aunque los procedimientos de entrada pueden cambiar de un año a otro, por lo que es fundamental verificar la información.

Habla con personas que hayan navegado en la zona para obtener consejos prácticos y experiencias de primera mano. Participar en foros de navegantes o clubes náuticos también puede proporcionarte información valiosa y actual. 

En definitiva, sé diligente y cauteloso para evitar problemas y así disfrutar más de tu barco.
DERROTERO CARIBE
  • Fernando Pastor Profesor
    Fernando Pastor
    Patron profesional, instructor y divulgador.
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