¿Cuándo se produce una situación de "Hombre al agua"?
La situación se produce como ya hemos comentado antes, cuando un tripulante cae sin esperarlo al agua por el motivo que sea. Es importante tener en cuenta que los primeros 30 segundos desde que el individuo cae al agua son los momentos más cruciales que pueden ser determinantes en que se quede como algo anecdótico o trágico.
Hay que incidir en que tener ubicado siempre al MOB debe ser la prioridad.
Fases de un MOB:- Es fundamental tener siempre a la visa al MOB
- Aproximar al individuo al barco
- Recuperarle
Dificultades de ubicar al MOB:- Abortamiento o deriva
- Tener mucha altura de las olas dificultando avistar al individuo
- Visibilidad
¿Qué hacer en caso de hombre al agua?
Uno de los sucesos más graves que requiere la actuación inmediata, por parte de la tripulación de una embarcación, es la caída al mar de un persona.
En mucho casos este tipo de accidentes acaba en tragedia por varios motivos (no echar en falta a la persona siniestrada, condiciones meteorológicas desfavorables, pérdida del contacto visual del náufrago, etc. )
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¿Cómo hacer la maniobra?
En embarcaciones a motor, la llamada
maniobra de Boutakov sirve cuando se ve que un náufrago cae al agua, y se quiere volver rápidamente a la situación de caída. Permite deshacer el rumbo anterior y tratar de regresar a la zona, aunque hay que contar con la deriva del náufrago y con las corrientes
- Vire momentáneamente 70º a la banda de la caída al agua.
- En cuanto se estabilice en el nuevo rumbo, vire 180º a la banda contraria, estabilice el rumbo y avance.
- En su caso, navegue en zigzag sobre ese rumbo y siguiendo los objetos que arrojó. Como éstos se desplazan con el viento más deprisa que el náufrago, busque a barlovento de ellos.
En embarcaciones a vela, virar y aprobarse al viento hasta ponerse a la capa. La embarcación derivará hacia la supuesta posición de la caída. Si navegaba de empopada, resulta más complicada la maniobra. Arríe las velas y arranque el motor.
Aspectos a tener en cuenta en el naufragio
El patrón de la embarcación tiene que dar unas
normas básicas de seguridad: debe explicar la importancia de la distribución de los pesos (sobre todo en embarcaciones pequeñas), tener despejada la cubierta (estibar objetos y adujar cabos), además de instruir al resto de la tripulación con unas nociones básicas de cómo actuar en caso de
“Hombre al Agua”.
Tener localizado el
chaleco salvavidas y enseñar su correcto uso. El bichero también debemos tenerlo a mano, nos facilitará enganchar al náufrago, más si lleva el chaleco puesto. Hoy en día existen diferentes modelos que incorporan luz y radiobaliza personal (transmiten la localización al GPS del barco).
El uso del
arnés y utilizar líneas de vida evitarán caer al agua.
Lanzar el aro salvavidas. Comprobar que los
aros salvavidas están bien estibados y no haya elementos que impidan su zafado. Es muy importante el uso de estos objetos flotantes ya que pueden servir de asidero al náufrago. Especialmente indicados los que están provistos de rabiza, luz y señales flamígeras. La
percha IOR también nos será de ayuda.
Intentar no perder el
contacto visual y en la medida de lo posible señalizar. El ojo humano nos permite descubrir un objeto del tamaño de una cabeza humana y parte del cuerpo que sobresalga del agua a 350 metros aproximadamente. Teniendo en cuenta que las condiciones meteorológicas pueden ser adversas, el tiempo en el que el náufrago podrá ser avistado será muy limitado.
Avisar al resto de la tripulación y en especial al
patrón de la banda por donde ha caído el náufrago para iniciar una de las distintas maniobras de búsqueda de hombre al agua.
Ser rápidos y estar tranquilos
El rescate
dependerá en gran medida de la
previsión, serenidad y rapidez de la tripulación del barco. Por lo que para evitar que estos hechos sucedan la mejor manera es la prevención.
La capacidad fisiológica del ojo humano le permite descubrir un objeto que sea abarcado dentro de un ángulo de dos minutos de arco, lo que equivale a decir, que una cabeza humana supuesta de 20 centímetros de diámetro, que es la parte del cuerpo que habitualmente sobresale del agua, puede ser vista a 345 metros de distancia (sin tener en cuenta los factores meteorológicos, posición del sol, etc. que pueden disminuir esta distancia).
Tener en cuenta la temperatura del agua
Como las posibilidades de supervivencia de un hombre en el agua dependerán, además de su constitución, estado físico y protección del frío, del tiempo de permanencia en el agua:
A 17º, se estima que el tiempo máximo de permanencia estaría sobre
las dos, tres horas. A 10º entre 20 y 60 minutos, es necesario proceder con la mayor rapidez posible a su búsqueda y rescate.
Reducir el número de tripulantes en la cubierta
En caso de que el estado de la mar empeore, el número de tripulantes en cubierta se limitará al
imprescindible para la maniobra. En todo caso, estos tripulantes deberán utilizar el arnés de seguridad y el chaleco salvavidas.
De noche se iluminará la cubierta si hay que realizar alguna maniobra; se usará calzado antideslizante y los tripulantes se asirán a los pasamanos en todos los desplazamientos por cubierta. La cubierta deberá ser :
- Antideslizante
- "Limpia" de obstáculos
- Contará con sólidos puntos de agarre.
Mantener a la tripulación consciente de la situación
Pero lo más importante es que la tripulación sea consciente de este riesgo y esté entrenada para reaccionar de forma inmediata para lo que debe haber sido adiestrada. El patrón también deberá
tener previsto un sistema de recogida e izado a bordo del náufrago.
Lanzar objetos flotantes al náufrago
Los tripulantes arrojarán los objetos flotantes que encuentren más a mano: salvavidas, maderas, etc., cerca del naufrago para que pueda asirse, y también para que sirvan de referencia si lo perdemos de vista.
Si es de noche la guindola con luz, u los objetos flotantes iluminados con focos, nos llevarán hasta el náufrago.
Plena atención del patrón cuando se le da el aviso de hombre al agua
El timonel, al oír los gritos de "hombre al agua",
meterá toda el timón a la banda de caída del náufrago para separar la popa y librarle de la hélice que, con su corriente de aspiración, podría producirle serios daños.
Si hay barcos en las proximidades se les informará por radioteléfono (emitiendo la señal de urgencia: PAN, PAN tres veces, dando cuenta de la emergencia y de la situación donde se produjo), y emitiendo como mínimo seis pitadas cortas, e izando la bandera "Oscar" del Código Internacional de Señales.
En definitiva, aquí te dejamos un resumen de lo que debes y no debes hacer si se da esta situación.
Consejos para no sufrir un accidente de Hombre al Agua
Pero en todo caso, la prevención es un factor importante de seguridad.
- Los desplazamientos por cubierta deberán reducirse al mínimo imprescindible en cuanto el balance y las cabezadas empiecen a ser importantes.
- No jugar cerca de zonas donde pueda producirse una caída.
- Controlar la toma de sustancias que puedan poner el riesgo de plenas facultades de una persona.
Qué hacer si cae un hombre al agua:- Gritar ¡hombre al agua! indicando si es a babor o a estribor
- Lance aros salvavidas, percha IOR, bote fumígeno, luz flotante (de noche).
- Arroje al agua todos los objetos flotantes que encuentre (defensas, chalecos) y cuéntelos para luego recogerlos.
- Si dispone de Chart-plotter, pulse el botón MOB (Man Over Board).
- Detenga de inmediato la máquina de la embarcación para no causar daños con la hélice. Si el náufrago lleva arnés puede ahogarse al ser remolcado velozmente. Arrancar de nuevo.
Qué no hacer nunca si cae un hombre al agua:- Saltar al agua en busca de la persona que se ha caído, sobre todo sin chaleco y sin estar sujeto por un cabo a la embarcación porque habrá dos náufragos en lugar de uno.
- Perder de vista al náufrago.
- Titubear en pedir ayuda.
- Abandonar la búsqueda demasiado pronto.
¿Qué función tiene la tecla MOB en un GPS?
Por su parte el patrón deberá estar atento y tendrá que tomar las decisiones que más se ajusten a las necesidades. Lo más importante es mantener la calma y actuar de manera precisa para perder el menor tiempo posible. En caso de hombre al agua el patrón deberá:
- Pulsar el botón “MOB” (siglas en inglés “Man Over Board”) del GPS, que nos creará un Dátum con las coordenadas del momento en el que se nos indica que una persona ha caído al agua. Lo que nos facilitará localizarlo. Deberemos tener en cuenta que puede haber transcurrido un periodo de tiempo desde que escuchamos “Hombre al Agua”. Además la corriente, el oleaje y el viento pueden alejar al náufrago de la posición inicial (datúm), por lo que tendremos que tenerlo en cuenta a la hora de dirigirnos hacia las coordenadas que nos muestra el GPS.
Si no disponemos del botón MOB en nuestro dispositivo de GPS, realizaremos alguna de las maniobras de recogida de Hombre al Agua:
- Curva de Evolución del Hombre al Agua.
- Maniobra de Anderson para embarcaciones rápidas.
- Maniobra de Boutakow o Método del Minuto, en caso de que el náufrago no esté a la vista.
- Movilizar a la tripulación mediante la señal acústica de Hombre al Agua (tres pitadas largas).
Comunicar al resto de embarcaciones próximas y al centro de coordinación de salvamento más cercano a través de los equipos de radio (VHF ch16), telefonía (900 202 202), izando la bandera O del Código Internacional de Señales y/o dando 6 pitadas cortas*
Recordar que
nunca hay que dar marcha atrás para evitar accidentes con la hélice del barco. Repitiendo la maniobra las veces que sea necesaria hasta que consigamos aproximarnos de manera correcta al náufrago (a ser posible por barlovento).
Una vez recuperado el náufrago y en función de su estado,
llamaremos al Centro Radio-Médico para recibir las indicaciones de cómo proceder. La hipotermia puede estar presente en personas que llevan mucho tiempo en el agua, siendo necesario en los casos más graves el uso del Soporte Vital Básico.