En el BOE del pasado viernes 13 de enero, se publicó el nombramiento de D. Manuel Rafael Rodriguez Valero como Director General de la Marina Mercante. Rodriguez Valero es Jefe de Máquinas de la Marina Mercante, Inspector del Lloyd's Register of Shipping, Doctor en Marina civil y máquinas navales y profesor titular de la Universidad de La Coruña.
Con su nombramiento se abren nuevas expectativas para la náutica de recreo: el extenso litoral, el clima, las infraestructuras, y la tradición turística de España, deberían hacernos volver los ojos a la náutica de recreo, como alternativa de calidad al turismo de masas y como fuente de generación de riqueza y de empleo, creando para ello las condiciones adecuadas, y acometiendo las reformas estructurales necesarias para competir, en igualdad de condiciones, con nuestros vecinos europeos.
Para ello es necesario, además de establecer un marco normativo y fiscal mejor que el actual, acometer las reformas necesarias que faciliten el acceso a la navegación de recreo, no sólo a los ciudadanos españoles, sino a los extranjeros que vendrían a nuestras costas a practicarla, desarrollándose así una importante industria que compense la crisis del sector pesquero y la casi desaparición de la flota de la marina mercante y que deberían incluir:
- Un nuevo marco jurídico específico en el que se establezca el carácter jurídico de la embarcación de recreo y en el que se regule esta actividad de ocio y turismo, totalmente ajena al deporte y a la marina mercante, para incluirlo en el Proyecto de Ley 121-000111/2006, de 3 noviembre, General de Navegación Marítima, cuyo plazo de enmiendas concluyo el pasado 4 de septiembre (Boletín del Congreso, 27 de junio).
- Soluciones a la carencia de patrones profesionales para embarcaciones de recreo ya que la normativa actual: disposición adicional quinta del Real Decreto por el que se regulan las titulaciones profesionales de la Marina Mercante, y en la que se establecen las condiciones para obtener la habilitación del Patrón de recreo profesional, no satisface en modo alguno esta necesidad. Los requisitos para obtener la citada “habilitación” profesional, debieran ser distintos de las exigencias derivadas de los convenios internacionales firmados por España para las tripulaciones de buques mercantes (Convenio STWC).
- Un acceso más sencillo a las titulaciones para el manejo de la embarcaciones de recreo: los exámenes para obtener las titulaciones que realiza la Dirección General de la Marina Mercante se convocan por procedimientos poco ágiles; se cierran los plazos de admisión de matriculas con excesiva antelación y se celebran pocas convocatorias.
Por otra parte, la ausencia de especialización en la navegación de recreo de los ponentes de los tribunales de examen, hace que estos resulten, cuando menos, inadecuados para un aspirante a navegante de recreo, con preguntas que no se ajustan al programa oficial, y otras irrelevantes, que nada aportan a la seguridad de la vida humana en la mar.
En resumen, un nuevo tratamiento para la náutica de recreo que requerirá imaginación y una firme voluntad política para acortar el trecho que nos separa todavía de los países de nuestro entorno.